Podemos decir que la vida se trata fundamentalmente de aprender a decir adiós. Morir antes de morir, dicen los sufíes. Y con ello, aprender a dejar morir a los que queremos. Pero, qué sucede cuando llega de verdad uno de esos adioses que nos dejan tambaleándonos, doloridos, desolados? Se puede aprender a decir adiós? Nos atrevemos con un poco de vergüenza a tratar este tema. Nos acompañas?